Vayan a Confesarse esta Cuaresma
|
|
El Obispo: Un mensaje de fe
|
|
|
|
Con la presencia de tanto sufrimiento en nuestro mundo, no
podemos ser indiferentes o pasivos. Nosotros somos llamados por
Dios para ver directamente las causas del pecado, sufrimiento, y
egoísmo. Dentro de cada uno de nosotros descansa una
"actitud protectora" donde primero somos nosotros y "
después los demás" de los cuales
ambos contribuyen al sufrimiento de otros.
Por naturaleza somos egoístas. Nosotros debemos aprender
a amar. Hasta nuestros mejores motivos son entrenados por alguna
mezcla de egocentrismo, como cuidar de uno mismo, y pensar que los
demás se defiendan por ellos mismos.
Examinar
No deseo que mi columna de esta semana se convierta en algo
oscuro y penumbroso, en este tiempo de Cuaresma, pero he sido
guiado a reflexionar mas acerca del poder del mal y del bien. Esto
me hace recordar las palabras de San Pablo sobre el mal y el bien,
"De hecho no hago el bien que quiero, sino el mal que no quiero,
eso ya no es obra mía sino del pecado que habita en
mí" (Romanos 7:19)
De alguna manera hay cosas del mundo que contribuyen a nuestro
egocentrismo, buscando nuestra comodidad; por eso Cristo nos llama
a este tiempo de Cuaresma, "arrepiéntanse y crean en la
Buena Nueva" Arrepentir significa cambio y cambio significa que
pongamos a los otras personas primero y a nosotros de segundo.
¿Cómo estamos?
Con la frente marcada con la cruz del Miércoles de Ceniza
nosotros comenzamos el tiempo de la Cuaresma haciendo penitencia,
abstinencia, oración y limosna. ¿Cómo se
encuentran ustedes acercándonos al día final de la
Cuaresma con el comienzo de la Semana Santa?
En la Semana Santa nosotros una vez mas abrazamos el misterio de
la Redención de Cristo. Jesús, inocente y sin pecado,
se entregó a nuestras manos y fue crucificado en la cruz por
un crimen de su época. Jesús acepto la sentencia de
nuestros pecados hasta su muerte porque él nos
amó.
Nuestros sacerdotes me dicen que cada día hay mas
católicos yendo a las Misas diarias, compartiendo
las devociones en las practica de los eventos que la iglesia y
usando la practica de la penitencia que nos ponen en contacto con
el pobre, el hambriento, y el que sufre.
Signos de esperanza
Estos son buenos signos, signos de esperanza. Estos muestran que
las personas se pueden identificar con aquellos que sufren, tienen
hambre, y luchan.
Nuestro trabajo como personas de Dios es mandado por Dios.
Jesús, su Hijo, nos mostró como hacer este trabajo y
el camino con nosotros a través de nuestro camino.
¿Dónde la Cuaresma nos guía a nosotros?
¿Nos guió a una verdadera conversión? La
verdadera conversión se traduce a hacer una buena
confesión. La conciencia es el centro y el santuario de una
persona, y una buena confesión requiere un examen de
conciencia, que cada individual tiene que hacer ante la verdad de
su vida.
Confiesen sus pecados
Este examen es el comienzo de una buena confesión. Es por
este examen que nosotros nombramos o identificamos nuestros
pecados, entonces después expresamos nuestros lamentos a
Dios, nosotros decimos que no volveremos a pecar y aceptamos la
penitencia del sacerdote como un signo de reparar nuestros pecados.
Porque sabemos que en Cristo podemos cambiar el odio grande y
pequeño de nuestras vidas en el amor por otros. Nosotros
también podemos tener conflicto y podemos transformarlo en
paz.
Vayan a Confesarse en esta Cuaresma. Dejen que su entendimiento
ponga final a sus conflictos, cambien el odio por el amor, dejen
que su corazón perdone a otros.
La confesión es buena para el alma. No es fácil,
pero es necesario.
|