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Una celebración de alegría y oración
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El Obispo: Un mensaje de fe
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Un millón de gracias a toda la gente que
planificó, rezó y festejo conmigo el pasado domingo,
29 de septiembre, con la fiesta de los Arcángeles Gabriel,
Miguel y Rafael y celebrando mis 50 años de sacerdocio, 22
como obispo y 9 como Obispo de Madison. También quisiera
agradecer a mi familia, sacerdotes, a los obispos que nos visitaron
y a los amigos de Des Moines y St. Paul-Minneapolis.
Un generoso agradecimiento
Muchos sacrificios fueron hechos por muchas personas para hacer
que este día nos llenara de alegría y felicidad. Yo
les debo mucho porque cosas como estas no suceden sino que toma
trabajo, trabajo y más trabajo.
El Comité de Planificación estaba encabezado por
el Monseñor Paul Swain; Monseñor Daniel Ganshert;
Monseñor Michael Hippee; Padre John Stillmank; Doctor
Patrick Gorman; Denise Boychuk Gorman; Kate Wiskus; Bill Brophy y
Greg Keller. Ellos fueron ayudados por Pat Born, Trish Rentner, Pat
Wenborne y otras personas de diferentes departamentos que ayudaron
al desarrollo de este evento. Yo sé que nadie espera un
reconocimiento o elogio pero en mi corazón, yo quiero
expresar un especial agradecimiento por las largas horas de
trabajo, los detalles y la manera como el comité supo
organizar todo. Los arzobispos, obispos, otros sacerdotes,
visitantes, amigos y otros mencionaron algunos cumplidos y
atenciones por este evento.
Monseñor Paul Swain predicó una clara, poderosa y
convincente homilía sobre la alegría de ser
sacerdote. Fue magníficamente preparada y predicada,
reflexionando profundamente la fe en el verdadero significado del
sacerdocio.
Como ustedes saben yo tengo dos palabras para expresar mi
gratitud - la primera es corta, y la otra es larga. La primera es:
"Gracias" Y la segunda es: "Muchísimas Gracias".
Padre John Hedrick
Yo finalizo esta corta columna agradeciendo a todos los que
oran, afirman y estiman mi trabajo como obispo. Yo haré,
como el Padre John Hedrick , Presidente del Concilio Presbiteral
dijo, "continúe, obispo, en colocar en las profundas aguas,
el calmado mar, las agitadas aguas"
Les voy a comentar una corta historia de mis días en la
marina de U.S a bordo de nuestro U.S.S. Yelowstown Destryer
Tender. Estuve asignado a la tarea de leer la profundidad de
las aguas con un instrumento diseñado para medir el
número de brazas del barco y la señal del
capitán cuando nosotros estábamos llegando a aguas de
poca profundidad, para no encallarnos.
Lanzar las redes
Yo no soy muy científico, pero aprendí a leer la
maquina de radar. Cuando el padre John Hedrick estuvo hablando el
domingo, me quede pensando, la barca de la iglesia necesita un buen
medidor para que la barca no este varada.
Mencionando la historia de los discípulos en la
vía para Emmaus, el Arzobispo Timothy Dolan dijo los
discípulos le dijeron a Jesús, "quédate con
nosotros, es tarde ahora, y nosotros te necesitamos" Yo
seguiré su consejo.
Con un corazón profundamente agradecido, estoy muy feliz
en cerrar mi columna con mi oración: "Con los recesos de la
mañana, yo busco en ti, Oh Dios, que seas mi fortaleza este
día, ¡Aleluya! Con el venir de la tarde y la sombra
terrenal del descenso de la noche, yo te miro con misericordia,
Señor, y descanso en tu amor. Mi corazón no esta en
descanso hasta que descanse en ti, Oh Dios. Amén"
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