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19 de julio de 2007

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en Español:

"Bajo el Libro del Evangelio"
Misas en Español en la Diócesis de Madison (de la edicion web del 10/12/2006)

Motu Propio: Uso del Misal Romano de 1962

(in English)

Ilustración del Libro del Evangelio abierto por encima de la cabeza del Obispo

Bajo el Libro
del Evangelio


+ Obispo Robert
C Morlino

Mis queridos hermanos sacerdotes y fieles de la Diócesis de Madison,

El sábado 7 de Julio, nuestro Santo Padre Benedicto XVI su Motu Propio (muy esperado por algunos) en referencia al uso del misal romano de 1962, publicado antes del Consejo Vaticano Segundo bendito por el Papa Juan XXIII. Por favor presten su mayoratención a las preguntas y respuestas con relación al Motu Propio, las cuales fueron editadas por el Secretariado de la Liturgia de nuestra Conferencia de obispos. Las preguntas hechas fueron excelentes y al punto, y las respuestas dadas son generalmente dadas por el Motu Propio mismo.

Tuve, de hecho, la intención de explicar el Motu Propio detalladamente en esta carta, pero las anotaciones el cual son muy fundamentales y relacionadas al Motu Propio están contenidas en el documento de USCCB en forma de preguntas y respuestas (vayan a www.usccb.org/liturgy)

Sí deseo hacer tres anotaciones importantes, sin sorprenderse, con relación al Motu Propio y luego ofrecer algunas observaciones de clausura.

No debe de causar desunión

En primer lugar, el uso más popular del misal de Papa Juan XXIII no debería de ninguna manera causar más desunión dentro de nuestra Iglesia diocesana o de la Iglesia de Estados Unidos. Como lo he dicho repetidamente, todo lo que hacemos en la liturgia y todo lo que no hacemos en la liturgia nos enseña algo. La liturgia es para agrupar y enseñar la fe auténtica de la Iglesia Católica.

El misal romano del Papa Juan XXIII del 1962, el misal romano de Pablo VI de 1970, así como la el del Papa Juan Pablo II en 1999 agrupan la misma fe. La celebración de la Eucaristía de acuerdo al uso de todos los tres misales es exactamente la misma.

Porque estos varios usos del Rito Romano agrupan la misma fe, no debería de haber desunión causada por esta diversidad particular. La única forma por la cual la división y la desunión puedan ser profundas a tras de un uso más popular del misario del Papa Juan XXIII sería si la fe de iglesia, incorporado por usos más recientes, fue de alguna forma malentendido, y en ciertos casos esto ha sido una realidad y yo he hablado de esta situación antes, el cual me trae al segundo punto.

Todavía necesitamos recuperación de la discontinuidad

El Papa Benedicto está dolido cuando indicar que la liturgia el cual fue sagrada y formadora de nuestra fe antes y durante el consejo -que es, la liturgia de acuerdo al misal de Pío V y el Papa Juan XXIII- no deben de ser prohibidas ni siquiera ser consideradas peligrosas. Es un mal entendimiento completo de la renovación litúrgica de acuerdo al Consejo del Vaticano Segundo y el misal del Papa Pablo VI para ver este uso después del Vaticano II, de cualquier forma, como un rechazo del uso de antes del Vaticano II.

Lo que fue sagrado y trajo a mucha gente a la santidad por muchos años no puede ser de repente ser justificado como prohibido o aun dañino. El Papa Benedicto nos invita a abrir nuestros corazones y permitir todas las expresiones el cual la fe auténtica permite y tiene varios usos de la celebración de la Eucaristía. Todos incluyen la fe verdadera y deberíamos dar la bienvenida a todos ellos con nuestros corazones abiertos.

Todavía necesitamos curarnos en nuestra Iglesia de los efectos desafortunados de la discontinuidad hermenéutica el cual ve la vida de la Iglesia antes del Vaticano II de alguna forma errónea y desafortunada al acercarse después del Vaticano II, lo que hubiera sido, la corrección precisa. El Papa Benedicto lo hace muy claro que los ritos litúrgicos después del consejo fueron algunos erróneos construidos como invitadores o hasta aún requerían creatividad, y él indica que esto ha causado ciertas "deformaciones" en la forma que la liturgia se celebra actualmente en ciertas partes.

Él indica que el profundo dolor personal que esto les ha causado a él y a muchos otros que se formaron en la fe sólida. Es precisamente por esa gente que han sufrido tales "deformaciones arbitrarias" de la liturgia después del consejo, que esta habilidad más amplia del uso del misal del Papa Juan XXIII. No debería de haber una ruptura en el uso de la liturgia en términos de antes o después del Vaticano II, porque la fe de la Iglesia abarcada antes y después del Vaticano II deben de ser exactamente la misma fe.

No debió haber sido permitida en la Diócesis

Tercero, probablemente ya saben que la Diocesis de Madison es la única Diocesis en el estado de Wisconsin donde yo, como Obispo, nunca he permitido la celebración de la misa de acuerdo al misal del Papa Juan XXIII.

Lo he hecho así no porque tenga ningún disgusto de ese uso particular. De hecho, yo asistía en al misa de acuerdo al misal de Pío V y Juan XXIII como niño y casi todos las mañanas cuando estaba en secundaria con los jesuitas en la Escuela Preparatoria de Scranton mi vocación me vino en la palabra de Jesucristo hablada a través de ese uso litúrgico. Ya estaba en el seminario antes de 1970, cuando recibimos el misal de Pablo XVI, el llamado Novus Ordo.

Debería de agregar que cuando ya era sacerdote en la Diocesis de Kalamazoo se me pidió por el Obispo Donavan, en respuesta a muchas peticiones, el celebrar la misa de acuerdo al misal de Juan XXIII una vez al mes, pera el bien de los fieles y lo hice con gozo.

Mi razón por no permitir la celebración de la Misa de acuerdo al misal de Papa Juan XXIII en la Diocesis de Madison es simplemente que cierto apoyo catequista es necesario porque aquellos que están atados a esta forma de celebración por muchos años con frecuencia han olvidado o se han "herrumbrado" a lo que es una participación completa, activa y fructífera seria.

Además, como el Papa Benedicto lo indica, hay mucha gente joven que por varias razones, está atraída a esta forma de celebración pero no han recibido ninguna instrucción de catequesis. La falta de recursos de personal para proporcionar una catequesis completa para aquellos que necesitan tal catequesis con referencia al uso del misal del Papa Juan XXIII ha sido mi razón de no dar permiso para tales celebraciones en la Diocesis de Madison.

Nunca he estado en contra de tales celebraciones en principio, pero nuestra circunstancia concreta y falta de recursos de catequesis para apoyar tales celebraciones me han guiado hacia un juicio prudente. Yo creo que tales celebraciones generalmente no deberían permitirse.

La obediencia abre puertas a la libertad

El Motu Propio de nuestro Santo Padre disminuye una determinación que él ha hecho en su oficina como Maestro Supremo de la Iglesia, y yo he solemne y públicamente prometido ser fiel en mi obediencia al sucesor del Apóstol Pedro. El Papa Benedicto indica que su juicio en este asunto está designado para liberar a los obispos de hacer constantes juicios prudenciales en circunstancias cambiantes con frecuencia.

El Papa Benedicto claramente es sabio; la obediencia de acuerdo a la mente de Cristo siempre abre la puerta a una verdadera libertad. Estoy feliz de actuar en obediencia al Motu Propio del Papa Benedicto, y estoy agradecido de haber sido liberado de la limitación de mi propio juicio.

Siempre estoy más sereno y con paz cuando soy obediente. Acuérdense que yo fui entrenado como Jesuita y de acuerdo de la Regla de San Ignacio, la obediencia es para los Jesuitas como la pobreza es para los Franciscanos- es la base fundamental. Así esta obediencia me trae gozo, serenidad y libertad y espero que este sea el caso para todos mis hermanos sacerdotes y para todos los fieles en la Diócesis de Madison.

La Misa necesita entrenamiento primero

El Motu Propio toma efecto el 14 de septiembre de 2007. Providencialmente, yo tengo una asamblea de sacerdotes el jueves 12 de julio. En ésta reunión discutiré el asunto en su totalidad con nuestros sacerdotes y les pediré que me aconsejen a como podríamos invitar las peticiones que puedan surgir para la celebración de la Misa de acuerdo al Misal del Papa Juan XXIII.

Ya ha habido varias peticiones que se me han presentado en casi cuatro años que he sido obispo, y hay una viva expresión de esperanza de esta celebración en mi escritorio en este momento.

Como una señal de mi obediencia al Santo Padre pretendo celebrar Misa de acuerdo al Misal de Juan XXIII en una ocasión tan pronto como me sea posible. Dijo "tan pronto como me sea posible" porque no tengo ciertas vestimentas que son necesarias como obispo para celebrar de acuerdo a este uso particular, ni tampoco lo he hecho como obispo.

Así, me es necesario educarme en estos asuntos y obtener la vestimenta apropiada. También es necesario ver cual de nuestros sacerdotes pueda estar en posición de celebrar Misa de acuerdo a este uso. El documento del Papa Benedicto hace claro que si el sacerdote no está entrenado para hacerlo, él no debería de hacerlo sin ese entrenamiento.

Y luego tendríamos que entrenar a un cierto número de monaguillos que están al tanto de la liturgia, y que conocer algo de latín. Sin duda en Madison la Academia de San Ambrosio pueda ser un recurso apropiado.

Todavía es una forma extraordinaria

Muchas gracias por su atención y consideración a este asunto. Les pido a aquellos atraídos a esta alabanza de acuerdo al misal del Papa Juan XXIII a presentarse a sus sacerdotes y a mí en los próximos días para poder servirles en un tiempo razonable al hacer las preparaciones necesarias.

Por favor recuerden que el misal del Papa Pablo VI, el Novus Ordo, que siguió el Vaticano II es la forma ordinaria de la celebración litúrgica, donde la celebración de acuerdo al misal del Papa Juan XIII es la forma extraordinaria. Sería desafortunado si los individuos acudan a la forma extraordinaria simplemente porque han estado desilusionados en su esperanza de una celebración reverente de la forma ordinaria.

Al abrir posibilidades de una expresión litúrgica de las verdades de nuestra fe, dediquémonos a que cada celebración, ya sea la forma ordinaria o la forma extraordinaria, exprese la reverencia apropiada a la verdad que esa celebración una la tierra al cielo y nos unan en la Diócesis de Madison con la gran asamblea de los Ángeles y los Santos. Muchas gracias por leer este artículo. Que Dios los bendiga a todos.

¡Bendito sea Jesucristo!


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