Queridos amigos, Durante la cuaresma nos preparamos a celebrar la festividad más grande de nuestro año en la Iglesia con la Resurrección de Jesús Cristo - ya que si Cristo no resucita, nuestra fe seria en vano. Lo básico para nuestra fe de resurrección es que Cristo fue elevado en un cuerpo glorificado, un cuerpo en cierta forma misteriosa unido con su cuerpo mundano - Él fue identificado por la cicatriz del clavo en su mano, sus pies y su costado por el apóstol Tomas. Todos nosotros estamos destinados a una resurrección del cuerpo porque el ser humano es ser una unidad de mente-cuerpo, y no una separación de mente-cuerpo. Y esa unidad de mente-cuerpo es la intención del Padre, Hijo y el Espíritu Santo que sean nuestra forma de vida para toda la eternidad.
Durante la cuaresma nos preparamos para nuestra vida en eternidad, eso implica que vallamos en contra de esas tendencias dentro de nosotros que reflejan una separación de mente-cuerpo, porque nosotros buscamos una unidad de mente-cuerpo. Esto no es fácil en nuestra cultura porque nuestra cultura parece decirnos que si yo pienso que algo sea el caso, y yo siento que ese es el caso, entonces ese es el caso. Esto pone nuestra vida en un cuerpo por aparte y da completo reino a la vida de la mente. Ya que Cristo tomó naturaleza humana en sí mismo incluyendo un cuerpo humano, y por la resurrección de su cuerpo humano, nuestra fe nos llama a creer que el cuerpo no es menos sagrado que la mente - es nuestra presencia en este mundo destinado para la gloria del próximo. Expresen reverencia en mente y cuerpoMe parece que una de las tareas para todos nosotros durante la cuaresma es el ser más fieles con el regalo del Espíritu Santo que recibimos en la Confirmación, ese Espíritu que es un Espíritu de reverencia. Con frecuencia en nuestro país y en nuestra cultura aplicamos la separación de mente-cuerpo a la noción de la reverencia. Yo pienso que soy reverente, me siento reverente, por lo tanto soy reverente. La reverencia se refiere a lo que se manifiesta en el cuerpo así como con lo que yo pienso. Si la manifestación en el cuerpo no fuera importante, Cristo no hubiera aparecido en forma cuerpo - así de simple. La vacilación por parte de algunos católicos de arrodillarse es un ejemplo. Yo pienso que la mayoría de nosotros, si pudiéramos físicamente, nos arrodillaríamos si nuestra Santa Madre se nos apareciera en privado - pienso que lo haríamos en una forma natural. Que más natural que el arrodillarse ante Cristo nuestro Dios presente en la Eucaristía cuando es apropiado. Nuestra cultura nos guía a no poner atención en cuanto a la reverencia particularmente en la Misa. Para recibir la sagrada Hostia, el Cuerpo y la Sangre de Cristo, en nuestras bocas cuando estamos mascando chicle no podría ser diseñado como una señal de reverencia. Yo se que la gente que hace eso, primordialmente la gente joven, no lo hacen con malicia, y ellos pueden pretender ser reverentes, pero la intención tiene que ser vivida en el cuerpo y no expresada en la mente. El llegar a Misa a tiempo, quedarse hasta el final, vestirse apropiadamente y modestamente, todas esas cosas son parte del lenguaje del cuerpo cuando se aplica a la reverencia. Naden contra la corriente de la culturaTambién me parece que los contribuidores más grandes a la declinación de la reverencia en nuestra cultura y sociedad son los programas de televisión y mucho de lo que sucede en el Internet. La cultura cuando se exhibe en esos medios de comunicación masivos es generalmente un lugar donde no hay nada de exhibición de reverencia. Aun nuestras señales y símbolos religiosos se encuentran despreciados y profanados como cuando el crucifijo fue sumergido en una botella de orina y eso se dió como una presentación artística aceptada. Tal vez ya he dicho demasiado acerca de la obra de teatro Corpus Christi. La cuaresma podría ser una oportunidad maravillosa para todos nosotros para pedirle a Jesús que nos dé Su Espíritu vivo dentro de nosotros que recibimos en la Confirmación, el Espíritu de reverencia con el espíritu de coraje para nadar contra la corriente y vivir en nuestro cuerpo con reverencia que queremos tener hacia el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo quien habita en nuestras mentes y en nuestros corazones. La reverencia podría ser un tema muy apropiado para nuestra auto-disciplina durante la cuaresma. Y esa reverencia por supuesto debe de ser mostrada a cada persona humana todos aquellos hermanos y hermanas, a toda la vida humana desde la concepción hasta la muerte natural. La reverencia en realidad lo resume todo. La reverencia es donde sede. Que tengan una buena y santa cuaresma, una gloriosa cuaresma!. Muchas gracias por leer este artículo y que Dios los bendiga a cada uno de ustedes. Bendito sea Jesucristo.
Diocese of Madison, The Catholic Herald Offices: Bishop O'Connor Catholic Pastoral Center, 702 S. High Point Road, Madison Mailing address: P.O. Box 44985, Madison, WI 53744-4985 Phone: 608-821-3070 Fax: 608-821-3071 E-Mail: info@madisoncatholicherald.org Web site created by Leemark Communications. |