(Esta semana nuestra columna consiste en la homilía que el Obispo William H. Bullock celebró en la Misa de la Ordenación de sacerdotes de Jesucristo, Michael E. Moon, Tait C. Schroeder y David A. Wanish, el viernes 24 de mayo de 2002 en la Catedral de San Rafael.) Queridos Amigos en Cristo, Michael E. Moon, Tait C. Schroeder y David A. Wanish han venido a decir "si"a la llamada de Cristo y de la iglesia para servir a las personas de Dios como presbiterianos de la Diócesis de Madison. Es aquí en esta Catedral que muchos de nuestros sacerdotes reunidos esta noche se han ordenados por la colocación de las manos en el viejo rito que nos dieron los apóstoles. Con el sí de Mick, Tait y Dave, le damos gracias y alabanzas a Dios por el sacrificio de estos nuevos sacerdotes en servir e imitar a nuestro Señor Jesús. Esta es una noche de alegría y esperanza para todos nosotros que estamos con ellos quienes están colocando sus vidas en los pies de Cristo y comprometiéndose a ayudar a construir el reino de Dios, la iglesia. Renovados en el amor de DiosNosotros oramos para que todos ustedes sean renovados por la luz del Evangelio, que estemos fortalecidos por la presencia y el ministerio de nuestros nuevos ordenados así como muchos de los sacerdotes quienes sirven fielmente, honorablemente y con firme amor, y que han hecho mucho a través de la historia de nuestra diócesis. Es con su Obispo y estos sacerdotes que ustedes ofrecerán la primera Santa Misa esta noche. Esta noche todos nosotros nos levantamos con profunda fe de que el Dios que creemos no renovará en su amor y nos dará la gracia y una fortaleza especial para esos días venideros. Con alegría agradecemos a Dios por haber llamado a Mick, Tait y a Dave a su servicio. Su entusiasmo por servir a la gente de Dios nos vigoriza a todos. Pero nosotros venimos con una sincera oración, para que Satanás no los sacuda a ustedes como trigo (Lucas 22:31, Job. 1:11) Sinceramente oramos para que ellos sean leales a las responsabilidades del futuro. Corazones llenos de OraciónNuestros corazones están llenos de oraciones, himnos de alabanzas y de la grandeza de Dios, quien vino entre nosotros y nos atrajo a él. Todavía, ninguno de nosotros aquí, me arriesgaría a decir, que no haya estado afectado por el escándalo que envuelve el abuso sexual de niños y jóvenes por algunos sacerdotes. La publicidad es constante ante nosotros. Por eso les dijo: "¿Están seguros de que quieren ser sacerdotes?" "¿Están seguros que quieren ser un sacerdote ante el corazón de Cristo, el máximo Padre?" "¿Tendrán una vida como sacerdotes de Cristo, manteniéndose fiel y leal a Él de manera que sirvan a la gente de Dios?" Ser Escogido para servirLa respuesta correcta a esta pregunta llena los corazones de todos nosotros con gran alegría porque ustedes escogieron el camino correcto. El camino correcto en el análisis final les permite a ustedes escoger libremente a servir a Dios. Ustedes lo pueden hacer con confianza así sea con nuestros problemas de la iglesia porque nuestros laicos continúan diciendo que a pesar de su profunda tristeza por los escándalos sexuales, su fe continua sólida: porque la fe no tiene la base en los débiles seres humanos que somos todos sino que todos somos como sacerdotes pero en Cristo, Dios hecho hombre, nuestro Sumo sacerdote eterno. Responder al llamado de DiosLa alegría viene a ustedes por lo que seleccionaron, y nosotros compartimos con ustedes esta alegría, porque también hemos sido parte de su elección. ¿A dónde los llevará la decisión tomada esta noche? La elección responde la llamada de Dios en la respuesta de la llamada de la iglesia para ser sacerdotes comprometidos a trabajar duro por muchas horas y ser fuertes en los momentos de su soledad, desilusiones, sucesos y fracasos. En su elección de vivir el Misterio Pascual en Cristo; ustedes sufrirán, morirán y resucitarán de nuevo muchas veces. Mientras en este momento en la historia la iglesia de los Estados Unidos esta en un momento de humildad, nuestros católicos siguen queriendo a sus sacerdotes, reconocen sus dones, y los apoyan en sus oraciones. Al mismo tiempo, nosotros también sabemos que ninguno de nosotros es inmune al pecado. En la carta de San Pablo a los Hebreos, proclamada aquí esta noche, un sacerdote "tienen el poder de manejar o hablar con paciencia a los pecadores porque él mismo esta rodeado por debilidades". Estamos dolorosamente conscientes de eso como sacerdotes de Jesucristo. La Obediencia nos forma a nosotrosJesús también nos dio su propio ejemplo en como ser personas sacerdotales que participan en la misión de la salvación que él ha dado a la iglesia. "El hijo que él era" Las Escrituras nos recuerda, "él aprendió a obedecer de lo que el sufrió". Por su obediencia Jesús "fue la fuente de la eterna salvación para todos los que lo obedecian" Un sello de aquellos que desean ser sus discípulos es obediencia, obediencia a Dios - "ad audire" - nosotros lo escuchamos y lo seguimos a él. Jesús aprendió la obediencia a través de la muerte, la muerte en la cruz. La obediencia nos hace "colocar las redes en el mar y pescar" La obediencia no se inclina a nuestra voluntad contra nuestros deseos y necesidades personales; sino que nos forma para las dificultades de lo que seleccionamos en la vida. Nosotros nunca estamos solosCada uno en su propia manera, como un ministro ordenado, o consagrado, o un laico - cada uno de nosotros es llamado a seguir los pasos de Jesús, pero nosotros nunca tenemos que hacer esto solos. Nosotros lo hacemos en la vista del amor del Padre. Lo hacemos con Jesús caminando a su lado, cargando la cruz que sostuvo por nosotros. Lo hacemos llenos con los dones del Espíritu Santo, dado a todos nosotros. Lo hacemos como miembros de una "santa, católica y apostólica iglesia" Nosotros nunca estamos solos, sino que Dios siempre esta con nosotros, y nosotros estamos unos con otros en la comunidad de creyentes llamados iglesia, El Cuerpo Místico de Cristo. Escuchen la Palabra de JesúsMis hermanos, Mick, Tait, y Dave, las palabras de Jesús en el Evangelio a sus discípulos son las palabras que él nos habla esta noche. Primero, Jesús les dice, "Así como el Padre me ha amado, así los he amado. Vivan en mi amor" Esta en mi oración, en una manera especial, que ustedes escuchen esas palabras todos los días de su sacerdocio, "vivan en mi amor" dejen que el amor de Jesús los tome, los llene y los rodee a todos ustedes ahora que serán sacerdotes. Dejando que el amor de Cristo tenga su propio camino con ustedes, ustedes pueden seguir los mandamientos de Cristo: "No hay amor más grande que el ayudar a su prójimo" Finalmente, Cristo nos recuerda que, "No fueron ustedes los que me escogieron, fui yo quien los escogió para enviarnos a proclamar su Palabra. Esta noche por la imposición de las manos y la oración de la iglesia yo como su Obispo haré que esa opción de Jesús sea final en sus vidas. Ustedes van hacer sacerdotes para siempre. Jesús los escogió a ustedesJesús los eligió a ustedes de otros que él pudo haber escogido. En su amor él los escogió porque los ama. Él les pide que vivan en su amor y que vayan a proclamar su palabra. Escuchar al Señor Jesús decir, "Yo los he escogido; yo los amo con amor eterno" Así como ustedes escuchan su invitación a vivir en su amor, también lo escuchan decir que cada uno de ustedes, Mick, Tait y Dave, "no tengan miedo" "Busquen primero mi reino y todas lo demás se sumara a la Gloria del Padre y a la salvación de su gente".
Diocese of Madison, The Catholic Herald Offices: Bishop O'Connor Catholic Pastoral Center, 3577 High Point Road, Madison Mailing address: P.O. Box 44985, Madison, WI 53744-4985 Phone: 608-821-3070 Fax: 608-821-3071 E-Mail: info@madisoncatholicherald.org Web site created by Leemark Communications. |