Local/State News National/World News
The Catholic Herald: Official Newspaper of the Diocese of Madison Front page Most recent issue Past issues
Artículos en Español:
31 de Octubre del 2002

News
Bishop Speaks
Spirituality
Columns
Editorial/Letters
Arts
Calendar
About Us
Advertising
Subscriptions
Feedback
Links


Artículos
en Español:

Artículo escrito por el Obispo Bullock

Celebración de Vida -- Todos los Santos y todos los Difuntos

Obispo William H. Bullock
El Obispo:
Un mensaje de fe

Obispo
William H. Bullock

Cada uno de nosotros es llamado, de hecho, todos los bautizados somos llamados a la santidad. Dios en su poder creativo nos creo, manteniendo en su poder nuestra vida, y llamándonos a compartir íntimamente su amor por toda la eternidad.

El Papa Juan Pablo II ha beatificado y canonizado un extraordinario número de personas como santos en sus 25 años como Papa. Con frecuencia el Papa Juan Pablo II, haciendo visitas pastorales a diferentes países, y usando esto como ocasión de realzar los conocimientos de las personas para el llamado universal a la santidad por la beatificación de la persona.

Las personas santas de Dios

En nuestro país nuestro Santo Padre ha beatificado a varias personas entre ellas, San Samuel Mazzachelli, Santa Catherine Drexel, San Junipero Serra y San Kateri Tekakwitha. Estas personas bendecidas respondieron al llamado de Dios a la santidad y a usar el significado ofrecido por la iglesia para convertirse en santos, para ser excepcionales en una manera sencilla y humilde en la tierra.

La Madre Teresa de nuestro día, El Arzobispo Oscar Romero, Elizabeth Ann Setons y Edith Steins, nos mostraron como la verdadera santidad esta en nuestra iglesia.

Esta semana, con esta variada columna, como iglesia nosotros estamos celebrando el Día de todos los Santos - esos santos que no son conocidos por nombre sino por la verdadera vocación de su santidad. Sin embargo también es un día de fiesta, como las cartas de San Pablo: Las antiguas personas cristianas fueron llamadas santos, santas personas en busca de la perfección en Dios.

La lucha de nuestros días

En nuestra sociedad contemporánea es difícil mantener los ojos y el corazón en la santidad. Hay muchas tendencias al deseo de realización, a la posesión, posiciones distinguidas como marcas de sucesos en el mundo en que nosotros podemos fácilmente perder nuestro centro de apreciación de lo sencillo, lo verdadero y los valores que Dios muestra como esencial a su gente.

La complejidad de la sociedad y las dificultades de perder nuestro foco no debería desalentarnos de buscar la santidad. San Pablo nos recuerda que donde el pecado esta, la gracia de Dios abunda en todo. De este modo nosotros celebramos la víspera de todas las santidades, de todos los santos. Nosotros celebramos este día el 1 de noviembre.

Santos y almas humildes

La fiesta de todos los Santos, el 1 de noviembre, es seguida el 2 de noviembre con el Día de los Muertos. En este día nosotros conmemoramos y oramos por nuestros seres querido que han muerto. Nosotros oramos en cada Misa por la muerte diciendo, "por aquellos que han estado ante nosotros, marcados por la señal de la fe" o con esta oración: "Señor, recuerda aquellos que han muerto en la paz de Cristo y a todos los difuntos cuya fe es conocida solo por ti. Padre, en tu misericordia danos, a tus hijos, la entrada a nuestro patrimonio celestial en la compañía de la Virgen María, la Madre de Dios, y tus apóstoles y santos. Luego, en tu reino, líbranos de la corrupción del pecado y de la muerte, nosotros cantaremos el himno de tu gloria con cada criatura por Cristo nuestro Señor, a quien tu concediste todo lo bueno"

El mes del respeto por la Vida

Con la culminación del mes de octubre dedicado al Respecto por la vida, deseo que recordemos que nosotros somos de hecho, una iglesia de servicio completo. Nosotros ofrecemos enseñanzas que son consistentes, claras y constante y en nuestra vida litúrgica nosotros celebramos la vida con Dios.

La iglesia nos enseña que desde el momento de la concepción en el vientre de la madre hasta la muerte natural hay vida humana. Nosotros estamos en contra del aborto, la pena de muerte, la guerra nuclear y la eutanasia. Nosotros promovemos la protección de la vida en todas las fases y escenarios.

La Iglesia también celebra litúrgicamente el comienzo de esa vida con la bendición de la mujer con el niño y el recién nacido. La iglesia, centrada en la celebración de la Sagrada Eucaristía o la Misa, nos ofrece el Cuerpo y La Sangre de Cristo como alimento espiritual. Sin embargo, a través de los sacramentos dados por Dios, la iglesia celebra nueva vida con los sacramentos del Bautismo y la Confirmación.

También nosotros celebramos el matrimonio y la orden sacerdotal como sacramentos de vida. Nosotros tenemos un sacramento para la Unción de los enfermos para todos aquellos que están enfermos. En el instante de una condición de vida amenazada nosotros también damos la Santa Comunión.

Para aquellos que caen en su vida espiritual por medio del pecado mortal o serio, nosotros tenemos el sacramento de la reconciliación para recuperar la vida de los efectos de la muerte por el pecado.

Humano y Litúrgico

Nosotros predicamos y enseñamos la vida de una manera consistente, constante y clara. Nosotros respetamos la vida humana, pero también nosotros celebramos litúrgicamente lo nuevo de la gracia de Dios y la vida en los sacramentos. Desde la bendición de un niño en el vientre de su madre hasta el final del entierro en el cementerio, la iglesia esta allí afirmando la vida.

Así sea después de la muerte y el entierro, nosotros continuamos en la tierra orando por aquellos en el purgatorio. Hemos sido intercesores de los santos en el cielo quienes oran e interceden por nosotros.

Gracias a Dios por la Iglesia

A veces me pregunto si nosotros agradecemos a Dios con frecuencia por el completo servicio que recibimos desde el comienzo del ser humano hasta nuestro destino final en el Reino de Dios. Yo siento, que no lo hacemos suficiente, pero estos días de fiesta podemos servir y recordar nuestra profunda gratitud por la plenitud de nuestra iglesia y con el corazón a nuestro viaje con Dios.

Por los santos nosotros decimos: "Bendito seas Dios con sus ángeles y con sus santos" Para los pobre en alma nosotros decimos: "El eterno descanso sean para ellos O Señor y que la luz perpetua brille en ellos"


Jump to:   Top of page


Front page           Most recent issue           Past issues



Diocese of Madison, The Catholic Herald
Offices: Bishop O'Connor Catholic Pastoral Center, 702 S. High Point Road, Madison
Mailing address: P.O. Box 44985, Madison, WI 53744-4985
Phone: 608-821-3070     Fax: 608-821-3071     E-Mail: info@madisoncatholicherald.org

Web site created by Leemark Communications.